jueves, 5 de enero de 2012

Todas las promesas de mi amor serán contigo.


En días como estos, uno se da cuenta de cuanto se ha crecido, de como las cosas han cambiado, y de como la inocencia se fue quedando atrás.

Pocas son las personas que consiguen hacerte regresar a lo más absurdo de tu niñez, que a la vez es lo más bonito, personalmente, pienso, que son esas personas las que más se merecen un gracias. Porque aunque lo parezca, no siempre es fácil arrancar una sonrisa, mostrarte alegre cuando no lo estás o decir simples tonterías a través de las cuales conseguir una carcajada.No, no siempre es fácil.

Justamente es ahí donde está el mérito, en intentar ser y hacer feliz a los que te rodean, a pesar de estar pasando por un mal momento, o simplemente no tener ganas. Es un privilegio contar con personas así a tu lado, porque, a pesar de los inconvenientes que se presenten al ir madurando o creciendo, siempre resultará un poquito más facil, sentir esa alegría y esa ingnorancia de cuando eras tan ingnorantemente feliz.

Por eso, gracias; gracias por todo.